Seguidores de † En un mundo paralelo †

El libro sin título



                                         CAPITULO 1
 Abro los ojos  , realmente no recuerdo nada.   
 Por mucho que fuerzo mi vista , no logro ver con claridad donde estoy.
Porfin , mis ojos se acostumbran a la cegadora luz que entra por la ventana. Enseguida veo                que estoy en una camilla de palidas sábanas blancas rodeada de maquinas ,que nisiquiera mi mente sabe recordar como se llaman.

Me intento sentar sobre la camilla pero pese amis esfuerzos no lo consigo ,asi que dejo a mi fragil cuerpo caer de nuevo sobre la fría camilla.
Antes de darme cuenta aparece una enfermera.

-No debe hacer movimientos bruscos.

-¿Dónde estoy?¿Quien es usted?¿No hay nadie mas?- La mujer parece acongojarse ,tiene aspecto cansado y me mira con tristeza.  

-Esta en el hospital mas cercano a donde la encontraron , de echo en el hospital Windlethon ;Australia.

-¿Pero como he llegado aquí?

-Tranquila, todo a su tiempo de momento me presento – la mujer me mira con simpatía y no puedo aguantar la risa al ver como los mechones de pelo le caen de su fragil recogido.-Me llamo Victoria pero puedes llamarme Vicky – Después de eso me mira y sonríe.

-Yo me llamo… - O no ,no puede ser no consigo recordar mi nombre , y ahora que lo pienso tampoco se como es mi aspecto ni como soy yo , no se nada de mi .-Disculpe no , no se que me pasa .. no logro recordar como me llamo.

-Tranquila , eso ya lo sabiamos ,debido al golpe que te distes ,tienes amnesia .-Realmente esas palabras me resuenan en la cabeza .

-Porfavor , ¿donde hay un espejo ?

-Tome – me entrega un pequeño espejo , nada especial es una circunferencia con un pequeño espejo en el centro.

Al verme un pequeño cosquilleo corre por mi cuerpo.Soy una chica un poco singular,pelirroja , de ojos azules ,y tan palida como la porcelana.Después observo mi cuerpo ,demasiado delgada ,aunque al ver mi muñeca veo un pequeño brazalete de plata en el que en la parte posterior hay una llave dibujada. 

-Y , no se sabe si ¿tengo familia ,o amigos o alguien ? –pregunto muy confusa , me siento realmente sola , una oleada de desesperacion y tristeza me invade y no puedo aguantar el no llorar.

-Tranquilicese , encontraremos una solucion –Me mira de forma hosnesta y con tristeza , eso me profunde una gran desesperación que solo puedo expresar dandole un abrazo.-Lo único que hemos encontrado contigo es ese brazalete que llevas puesto , te lo intentamos quitar ,pero a sido en vano.

-¡Y por que me lo intentaron quitar!

-Por que sino  podía afectar a los resultados de las pruebas médicas.

-¿Hay probabilidades de que puedan descubrir quien soy? –Le preguntó pues no saber nada de tu pasado no es demasiado agradable.

-No lo sabemos de momento , es muy improbable pero ,hasta que te recuperes te quedarás aquí.

-¿Y cuando salga de aquí estare sola?

-No chiquilla, cuando te recuperes te hemos destinado con una familia que suponemos que será de tu agrado y podrán satisfacer tus deseos.

-¿Me podría describir como es esa familia? –Estoy intrigada, ¿y si no le caía bien a esa familia? , o mucho peor y ¿si esa familia me llegara a tener desprecio? Desperté de mis pensamientos cuando vi que a la enfermera se le había caído la jarra con agua caliente al suelo y se habia echo una  grave herida en la palma de la mano, con el cristal.Le miré la cara , estába aterrorizada y no paraba de mirar como la sangre caía al suelo.

-¿¡Dios mío que ha pasado!?

-N-N…o  lo se  , estaba echando el agua en esta palangana para que pudiese asearse y de repente.. de repente…-En ese momento un grito de terrorifico  y horripilante salió de su boca,me puso los pelos de punta.

-¿Qué está pasando aquí?, ¡Vicky que te pasa!  ,!traquilízate¡-Era un doctor que pasaba por el pasillo ,parecia tenerle aprecio a vicky ya que la abrazaba tiernamente.

-¡George ella ha vuelto!, es ella –me estába apuntando amí , esto  hizo que una gran montaña de confusion y miedo ocuparan mis pensamientos.

-¡Es ella¡ , tienes que mátarla –Ya no hablaba como una persona normal ,eso parecía mas un gruñido que una frase-¡Matalá!!Matala te he dicho!

No sabía que hacer pero de pronto algo me hizo pensar en el brazalete que llevaba puesto  , cuando lo miré se ilumino la llave  de color dorado que había dibujada en ella ,  acontinuación se apago y volvio a su estado original.Dejando una estéla de misterio.





                                     Capitulo 2
Estaba en la camilla serían las 2 de la madrugada, estaba mirando hacia el techo dejando volar mis pensamientos .Todo había sido muy rápido , miro a mi izquierda observando la palangana , el suelo y recordando la escena como si estuviera ocurriendo en este mismo momento.

Vicky gritando todo tipo de cosas ofensivas hacia mí , intentando abalanzarse sobre mí, si no llega a aparecer George no se qué habría pasado.

También recuerdo como entraba un doctor y le ponía un sedante, tambien recuerdo como George me contaba que, no sabía que le pasaba a Vicky.

-A sido un primer día movidito –me susurro a mí misma, esbozando una sonrisa .Y después caigo en  un largo sueño.

Por fin me despierto y me siento más calmada y menos frágil que el día anterior.
Cuando me voy a sentar sobre mi misma en el borde de la cama, noto como la sabana cae sobre mis piernas, y me doy cuenta que estoy desnuda.

Claro me habrán encontrado con ropas sucias y rotas.

Miro a mi alrededor y veo que a los pies de la cama unos vaqueros, una camiseta y un conjunto de ropa interior. Me parece una ropa un poco extraña para un hospital pero sin decir más la acepto y me visto.

-Veo que te va bien la ropa que te e traído- Esa voz me sobresalta, me doy la vuelta y veo a una chica alta, delgada, de un rubio muy intenso  y de unos ojos negros  muy profundos.

-Si, almenos eso creo-digo un poco confusa

-Si debo declarar que si te va perfecta –dice sonriendo-Bueno déjame presentarme me llamo Sonia y soy la hija de la familia Grigori, ya sabes la familia que te va a adoptar, pero sinceramente prefiero ser tu amiga a tu hermana, o bueno lo que tú quieras- Esta chica da mucho  que pensar, no puedo evitar reírme.- ¿Y tu cómo te llamas?   

-Yo…

-Lo siento no recordaba que tenías amnesia, perdóname –Se acerca y me da un gran abrazo.

-Bueno, bueno creo que he llegado en el momento de “sensibilidades femeninas”

-Cállate Akei, hay dios mío a veces  me pregunto si en verdad somos hermanos –le dice Sonia a Akei

-Me parece que si lo somos hermanita –se acerca a Sonia la agarra del hombro y le dice al oído –Aunque yo siempre seré el mayor y tú la pequeña

-Arggg pero yo siempre seré la mejor en deportes

-No es cierto yo soy el 1ª en todo tu siempre serás la 2ª –dice riéndose entre dientes
Me doy la vuelta y miro por la ventana riéndome mientras sigo oyendo como discuten los dos hermanos

*No soy la segunda, te he ganado en muchas cosas*
*No es cierto siempre gano yo*

En verdad no parecen hermanos, apoyo la mano en al manivela de la ventana y la abro, un  olor a flores entra en la habitación, no se porque pero me transmite añoranza.
Cuando me doy de nuevo la vuelta veo a Sonia realmente enfadada, y a Akei riéndose a carcajadas.

-Bueno señoritas –Dice agachándose como un caballero de la edad media- Permítanme coger sus equipajes, y dároslo para que lo lleven ustedes mismas –

-Oh válgame dios Akei, por un instante había pensado que eras un caballero.
Miró a mí alrededor, como símbolo de despedida

Cuándo por fin me decido a cerrar la puerta de la habitación, noto un gran dolor en mi muñeca.
Es horrible no puedo ni permanecer de pie, agarro con la otra mano mi muñeca  y intento quitarme el brazalete con todas mis fuerzas, pero no puedo.

Un grito de dolor estalla de mi boca.

Me caigo al suelo y permanezco boca arriba retorciéndome de dolor  y  de repente lo oigo 
Lo oigo a él, ese chico de pelo negro y ojos de color verdes  que grita desesperado desde el borde  del puente, y yo noto como caigo desde el puente al vacío y lo oigo, oigo mi nombre

-¡¡¡¡¡LILIIITTHHH!!!

Y después el silencio..

Lloro de alegría, y me doy cuenta que el dolor se a desvanecido y por fin cuando me estoy levantando aparece Akei por detrás de mí me sujeta por los brazos  me abraza y me susurra algo

 al oído que me parece deducir que es latín- Omne id quod non memini, totum praeteritum
Y después de eso caigo en un largo sueño sobre los brazos de Akei.

                                 Capitulo 3

Me desperté sobre el regazo de Akei, tenía el brazo rodeándome los hombros , y mis manos cogidas a las suyas.

Estaba profundamente dormido así que , con cuidado miré a mi alrededor, estábamos en un coche.

Donde se situaba el conductor había una pared corredera, en este caso estaba corrida. Las ventanas estaban cerradas y con unas corinillas.

Todo estaba oscuro , supongo que era para que nos durmiéramos .

-Veo que te has despertado- dijo Akei a modo de susurro.

-Si pero.. , duérmete tu si quieres no pasa nada.-Me apretó más hacia a él, en circunstancias normales le habría dicho que no le conocía de nada y que  me soltara; Pero Akei tenía ese algo que me hacía no querer separarme de él.

-No, ya he dormido demasiado-dijo en voz baja .

-Um…, Dónde está Sonia?- Va en otro coche , con una amiga suya , se llama Candela. No te la ha presentado por que cuando te fuimos a recoger Candela estaba visitando a un amigo suyo cerca del hospital.

-¿Me quedé dormida al salir del hospital?-pregunté pues no recordaba nada.

-Sí, al vestirte caíste encima de la camilla rendida de sueño.

-Dios mío, cada vez estoy más débil…

-Tranquila, poco a poco se te irá pasando.


No podía decirle la verdad, que le iba a decir “Te hipnotice, e hice olvidar todos tus recuerdos”, no evidentemente no podía, como tampoco podía dejar que recordara todo, sería horrible para ella y pensar que yo solo quiero protegerla.

Sólo la protejo, no quiero que le ocurra nada malo.

-Tienes los ojos de un color extraño- me dijo, despertándome de mis pensamientos en un instante.

-Sí, Am, tenemos que ponerte un nombre –dije esquivando el tema -¿sabes alguno que te guste?

-La verdad es que no, bueno solo recuerdo uno , creo que era… a si! ¡Crystall ¡-me dijo con los ojos muy abiertos.

-Si puede que te quede bien, aunque con lo tímida que eres no te pega mucho – dije riéndome

-Yo no soy tímida, soy, soy….

-Eres especial- le dije, quería ver una sonrisa en su cara.

-Bueno…, no creo que tanto como eso – dijo con los pómulos enrojecidos

-Sí lo eres-no aguantaba más, la cogí y la abrace.-Ese nombre te va perfecto, Crystall.


-Akei….-Me estaba abrazando, ¿Qué le pasaba?, nunca nos habíamos visto y me trata cómo si me conociera de siempre. Era extraño hundí mi cabeza entre su despeinada y oscura cabellera y respiré hondo.

-¿Acaso soy una colonia?- me preguntó riéndose

-No, pero hueles a pino

-¿A pino? –me preguntó extrañado

-Sí, te confesaré algo. Cuando abrí la ventana de mi habitación en el hospital el olor a flores me produjo añoranza, y al olerte no se he sentido como sí..

-¿Conocieras ese olor pero no sabes de donde?- Me sentí feliz de que me entendiera.
De mi boca estalló un enorme bostezo

-¿Tienes sueño?

-No

-Mmm, yo creo que sí

-No , no tengo

-Bueno si eso es verdad dime cuento es 567-143

-No se me dan bien las mates-Dije avergonzada

-Está bien, entónces dime quién descubrió América y en qué año

-Cristóbal Colón en 1492.

-Excelente señorita.

-Akei...

-¿Mmm?

-Nada, solo que... , ¿Por qué no me sueltas?

-Porque estás sobre mi protección –dijo

-Oh, humilde caballero no sabía que ahora fueseis mi escolta.- Le estaba siguiendo el juego , era gracioso hablar con él.

-Si lo sois dulce doncella, y déjeme llevarla en brazos ya que no tiene fuerzas- en ese instante abrió la puerta, me cogió en brazos y me llevó hasta la puerta de una lujosa mansión.

-Akei creo que puedo andar yo sola.- me tenía agarrada a él , con una mano debajo de mis rodillas y con otra en las espalda.

-No, no puedes

-¡Akei suéltame, quiero andar!- le dije furiosa

-No te puedo soltar ahora si no no podría hacer esto.

-¿El qué?

En ese instante se acerco amí y junto sus labios con los míos, no lo podía creer. ¿Era tan maleducado, que iba besando a chicas sin conocerlas de nada?

Pero por otra parte no quería soltarlo, no quería que ese beso acabara, Así que puse mi mano sobre su espeso cabello.